Hay gente que apenas conoce a una persona y ya está imaginando cómo sería el matrimonio, el nombre de los hijos e incluso dónde pasarán las vacaciones de 2030. No es que eso sea un problema, pero algunos signos tienen el don de vivir grandes historias de amor… solo en su imaginación. Por eso, te contamos cuáles son los signos que son maestros en fantasear romances dignos de telenovela mexicana, incluso cuando el flechazo apenas sabe su nombre. A continuación, los signos que viven grandes amores… solo en la imaginación.
Signos que viven grandes amores… solo en la imaginación
Piscis
Piscis, por supuesto, abre la lista. Después de todo, este signo es prácticamente el CEO del mundo de la fantasía. Cuando se enamora, ya crea un guion completo, con banda sonora, escena de reencuentro bajo la lluvia y todo lo demás. Sin embargo, el problema es que, muchas veces, el amor se queda solo allí: en su cabeza.
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Cáncer
Cáncer también tiene su lugar garantizado. El corazón canceriano es intenso, y aunque la relación ni siquiera haya comenzado, ya siente nostalgia. Por eso, no es raro ver a un canceriano viviendo una pasión épica sin haberse declarado nunca.
Libra
Los librianos adoran la idea del amor. Por eso, cualquier intercambio de miradas ya se convierte en una posible alma gemela. Fantasean, piensan en lo perfectos que serían juntos y, por supuesto, sufren en silencio al darse cuenta de que todo era solo idealización.
Tauro
Aunque parezca más práctico, Tauro también entra en esta lista. Es que, cuando le gusta alguien, crea planes a largo plazo, incluso sin saber si la otra persona está mínimamente interesada. Está bien, sucede…
Virgo
¡Sí, Virgo también aparece aquí! Aunque sea más racional, el virginiano analiza cada detalle de la persona y termina idealizando al compañero perfecto en su propia mente. Pero, en la práctica, es muy difícil que alguien cumpla con todas esas expectativas.
Todo el mundo ha vivido un amor platónico en algún momento de su vida. Pero algunos signos lo hacen con tanta frecuencia que parece hasta una profesión. Aun así, imaginar puede ser agradable, siempre y cuando recordemos que la realidad también puede sorprender.